Rumbo a Andújar

Ya lo comentamos en la noticia de días pasados que la siguiente visita tendría que ser a Andújar, para ver a Madre Rocío y conocer el proyecto donde se encuentra.

Y como estaba previsto, el sábado 11 de marzo, con la furgoneta cargada con todo lo que podíamos, nos acercamos a visitar el Hogar San Rafael en Andújar, dirigido por la congregación de Madres de Desamparados y donde se atienden a 31 menores.

Desde sus orígenes, la Congregación de Madres de Desamparados y San José de la Montaña, ha estado comprometida con la formación integral de niños y adolescentes.  Parte de la misión de las Madres de Desamparados son los hogares, con objetivo en la educación integral de niños y adolescentes en situación de desamparo, realizando una función sustitutoria temporal de la familia deteriorada o en gran dificultad.  Su presencia pretende aliviar las lacras de las múltiples caras de la pobreza socioeconómica, cultural y moral, ofreciendo un contexto de acogida, que lleve a la promoción integral de la persona de tal manera que la prepare para la autonomía y pueda, en un futuro, desenvolverse positivamente en el mundo laboral y social.

Un compromiso en la línea de actuación y esfuerzos de Avanza ONG, que pretende entre otros, los mismos objetivos con los menores.

En Avanza ONG tenemos un especial cariño con las Madres de Desamparados y su proyecto.   Desde hace varios años atendemos el Hogar San José de la Montaña en Arturo Soria, dirigido actualmente por Madre Angustias y anteriormente por Madre Aurora.

La selección de material se realizó durante varios días por el equipazo de voluntarios de Avanza ONG que se encuentran diariamente en el almacén.    Material escolar, productos de higiene personal, productos de limpieza (detergente principalmente) y algunos juguetes formaron los tres palets que cargamos en la furgoneta.

Y aunque nunca habíamos estado en el Hogar San Rafael, antes de entrar ya nos sentíamos en casa.   La recepción de Madre Rocío, la acogida de Madre Maricarmen y Alejandra mostrándonos todo el proyecto nos hizo olvidar los pocos más de 330 kilómetros recorridos.

Los que hemos tenido la suerte de conocer la vida de Madre Petra, fundadora de la congregación Madres de Desamparados, tenemos la convicción que las Madres de Desamparados con las que tratamos son fiel imagen de su fundadora.   Espectacular la serenidad, cariño, alegría e interés por los niños que atienden.   ¡Da gusto ayudar a estas instituciones!

Proyectos de construcción de futuro, apagando tantos traumas o deterioros que tienen los chavales en su infancia-adolescencia, con la finalidad de hacer de ellos personas con valores capaces de afrontar un incierto futuro.

Y aunque Andújar “tira mucho”, y nos quedamos con muchísimas ganas de volver de nuevo, la próxima visita prevista la tenemos en Salamanca para atender por primera vez la Casa Hogar Santa Teresa, dirigida por las Madres Carmelitas Teresas de San José que atienden a menores tutelados.   (Seguro que nos dejaremos caer por la residencia materno infantil Ave María y por el hogar Rosalía Rendú).   ¡Llegaremos pronto, muy pronto!

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