¡A ritmo de Rock’n’Roll!

El rock n roll se apodera de nosotros cada vez que vemos que se aproximan abril y la primavera. Hay algo que empieza a tramarse en las calles de Madrid, ¡la Rock `n´ Roll Madrid Maratón & ½!

 

Así que el 20 y 21 de abril nos instalamos en un gran stand de la Feria ExpoDepor, donde todos los corredores recogen su dorsal. En nuestro espacio pusimos nuestro gran contador, un photocall, huchas solidarias, chuches para todos, unas letras luminosas que animaban a los participantes a donar su kilo, etc…¡todo un despliegue de medios! 😉

 

Muchos fueron los runners que se acercaron a nuestro stand para traernos unos kilitos solidarios para sumar poco a poco y llenar las despensas de los comedores sociales de Madrid. Los que no tenían kilo nos dejaron algún eurillo, porque ya saben que todo el dinero recaudado lo convertimos nosotros en alimentos para esos mismos comedores.

 

El sábado 21, además de estar en la feria hablando con todo el que pasaba por nuestro puesto, participamos en la Pasta Party, una comida en la que todos los excedentes de pasta y fruta irían destinados a ayudar a los más desfavorecidos de Madrid.

 

Después de la Pasta Party comenzamos el lío, unificar la comida sobrante de la fiesta para meterla en un camión y llevarla directamente al comedor social correspondiente. Fueron más de 10 palets de alimentos para distintas instituciones: Ángeles Urbanos -que atienden a niños discapacitados y sin recursos-, al comedor de San Ramón Nonato en el Puente de Vallecas y a las Hermanitas de los Pobres, una residencia para personas sin recursos en Doctor Esquerdo.

 

Y amaneció el día de la carrera. Agotados del maratón del día anterior, pero con ganas de ver los excedentes del avituallamiento para seguir repartiendo solidaridad a los más desfavorecidos de Madrid y cerrar el número de alimentos recogidos durante todo el transcurso de la feria: ¡16.860! Una auténtica pasada y superando por 5.000 kilos la cifra del año anterior, ¡gracias!

 

Esta vez fuimos a tres comedores sociales, cada uno en una punta de Madrid: el comedor social de Martínez Campos, la residencia de madres solteras y abandonadas en Pozuelo, y la parroquia de San Juan de Dios, en la UVA de Vallecas. ¡Qué felices nos recibieron y qué alegría poder llevar un acontecimiento como la maratón a tantos rincones de Madrid en forma de solidaridad, de naranjas, de pasta, de Powerade…de todo!

Como siempre, queremos agradecer, en nuestro nombre y en el de todas las personas que han recibido esta ayuda, su generosidad a la organización, al equipazo de Mapoma, y a todos los participantes, voluntarios y amigos que han estado ahí apoyando y dándolo todo.

¡Un millón de gracias!

 

 

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